HANNIA VEGA UNA VIDA AL SERVICIO DE LAS ORGANIZACIONES SOCIALES

El nombre de Hannia Vega es relacionado por los heredianos con el servicio social, y Coopemupro le reconoció ese esfuerzo otorgándole el premio Mujer Ejemplo de Trabajo 2019.

Desde muy joven colaboró en las juntas de educación de las escuelas Rafael Moya y Cleto González, en junta administrativa del Liceo de Heredia, el Comité de Deportes y en el Hogar de Ancianos Alfredo y Delia Flores.

Es precisamente del Hogar donde guarda los mejores recuerdos tras una década de ser parte de la junta administradora, puesto que dejó hace poco tiempo, pero continúa colaborando.

La actividad de premiación se llevó a cabo en el Centro de la Cultura Omar Dengo, con la presencia de la junta directiva y asociadas de la cooperativa de mujeres y autoridades municipales.

¿Qué significado tiene este reconocimiento?

Primero fue una gran sorpresa, me sentí muy honrada por la designación, tal vez no tan merecedora, pero lo recibí con mucha alegría de que me tomaran en cuenta.

A mí siempre me ha movido ayudar a las comunidades, soy comunalista. Siempre me ha motivado esa ayuda desinteresadamente, uno trata qué las cosas funcionen y salgan adelante.

 

¿Cuál es el mejor recuerdo de toda esta trayectoria de servicio?

Cuando se logra el nuevo comedor escolar de la Escuela Moya, porque tenía mucho tiempo que lo habían eliminado y con la ayuda de la Municipalidad se logró contar de nuevo con este servicio para los niños.

En el Hogar de Ancianos me motiva mucho las risas de los señores cuando se les hace actividades. He tenido momentos muy agradables en el Hogar, soy adulta mayor y le decía al administrador que estoy trabajando por adultos mayores igual que yo, para que tengan una vida mejor. Trabaje mucho con el padre Vílchez porque cuando él llegó el Hogar estaba un poquito mal y él trató de sacarlo adelante, trabajamos duro para encaminar el Hogar. Diría sin temor a equivocarme, que están los mejores recuerdos ahí.

 

¿Y los momentos más difíciles?

También en el Hogar de Ancianos, cuando no había de dónde coger para pagar aguinaldos, porque ahora la gente no puede ayudar tanto como antes, esa angustia, ese sufrimiento para poder mantener el Hogar abierto, cuando vemos que hay goteras y no se pueden ayudar. Esos son los momentos más difíciles.

 

¿Qué sigue ahora?

En el Hogar dejé la directiva, pero no puedo alejarme, seguiré siempre poniendo mi granito de arena, pero no quiero estar en las juntas porque me he perdido muchas cosas familiares por ir a las reuniones. Es el momento que yo también pueda disfrutar en mi familia. Si ellos están en algo y me necesitan siempre dispuesta mientras Dios me de salud para hacerlo, porque soy adulta mayor y no con el ritmo que estaba antes. También estoy colaborando en la directiva del Comité de Deportes de Heredia, donde he aprendido mucho a estas edades a raíz de toda la coyuntura que se está pasando.

 

Qué mensaje les daría a los jóvenes para que se integren a las organizaciones sociales

Ojalá que la juventud y todos los ciudadanos tomen el estandarte y ayuden. El problema es que a poca gente le gusta trabajar ad honoren, muchos se pelean cuando pagan, pero cuando es gratis y más bien a veces hay que aportar, es difícil acercar a las personas.

Les diría que tomen un día para poner un granito de arena para que las organizaciones no se vengan a bajo, que ayuden en las juntas de educación y en todas las organizaciones que requieren ayuda porque el gobierno no les da las apoya. Muchos de los adultos mayores no tienen ni pensión y los gastos son mucho y ojalá muchas personas se ofrezcan a colaborar, porque en todas las comunidades hay organizaciones que requieren ayuda.

 

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