Como parte de su informe de los primeros cien días al frente del gobierno, el presidente Rodrigo Chaves planteó una serie de aspectos en los que ya está trabajando la Administración y otros que enviará al Congreso, porque requieren de leyes para implementarse.
Uno de los aspectos que -en medio de tan importantes anuncios- pasó un poco desapercibido, fue el planteamiento para legalizar la marihuana de uso recreativo.

Lo dijo, en el minuto 49 de un mensaje de casi sesenta minutos, genera la satisfacción de muchos y la preocupación de otros, dos líneas de un discurso de 18 páginas que se transmitió anoche al país desde Canal 13 y por las redes sociales de Casa Presidencial que abre nuevamente la discusión sobre la legalización de la marihuana en el país.
¿Qué es la marihuana de uso recreativo?
Según la revista Mejor con Salud cuando se utiliza con fines recreativos tiene un menor potencial de dependencia y sobredosis que otros psicoactivos, aunque hay variables que influyen, como la edad del consumidor, la forma en que se consume, la cantidad y los niveles de tetrahidrocannabinol (THC), que es uno de los dos principios activos que tiene la marihuana, el otro es el CBD (cannabidiol).
El TCH es una sustancia psicoactiva y es el que, en general, provoca alteraciones en la consciencia. Está presente en grandes cantidades en algunas de las variedades de sativa. El CBD, por su parte, tiene efectos terapéuticos y está más concentrado en la variedad índica.
Para que el consumo se considere recreativo debe hacerse con poca frecuencia, no con regularidad, en pequeñas cantidades, es de uso social, de manera que la persona no se sienta a consumir solo y que no implique un gasto importante.
La liberación del consumo de manera recreativa, se convertiría en un golpe al comercio ilegal, y le permitiría a los consumidores tener acceso a marihuana de mejor calidad.
En el país ya se aprobó en el periodo anterior, la producción, industrialización y comercialización del cáñamo y el cannabis medicinal, con el propósito de aliviar el dolor y dar tratamiento a personas que lo necesitan y ampliar las posibilidades para la salud de muchas personas, así como activar el agro con este nuevo cultivo, al permitir industrializar el cáñamo, para lo cual solamente deben tramitar una licencia.
También se declaró libre el cultivo, la producción, la industrialización, la comercialización de cáñamo o cannabis no psicoactivo y sus productos o subproductos, para fines alimentarios e industriales, sin autorización previa especial o adicional de las autoridades.
Y es que el cáñamo, tiene usos industriales como la fabricación de textiles, alimentos, semillas, aceites, biocombustibles, medicamentos y cosméticos, entre otros, y tiene bajo contenido de THC.
La Agencia EFE indicó que según datos de la consultora Grand View Research en 2020 el tamaño del mercado mundial del cáñamo se valoró en 3,61 billones de dólares y se esperaba un porcentaje de crecimiento anual del 16,2 % de 2021 a 2028 en respuesta a la alta demanda, y en el caso del cannabis medicinal, los estudios de mercado indican que en 2020 el mercado se valoró en 6.822 millones de dólares, y se proyecta que alcance los 53.883 millones de dólares en 2030, para un crecimiento anual del 23,6 % de 2021 a 2030.