El Liceo Ingeniero Samuel Sáenz Flores está conmemorando sus sesenta años de fundación y el mismo aniversario de la muerte del profesional a quien le dedicaron esa casa de estudios.
Como por azar del destino, el diez de marzo de 1964 fallecía el ingeniero Samuel Sáenz Flores y el primero de abril siguiente, abrió sus puertas el Liceo que llevaría su nombre, con la matrícula de cuatrocientos sesenta alumnos cristalizando el sueño del profesor Viriato Camacho del Club de Leones de Heredia y del licenciado Ismael Vargas, ministro de Educación.
El veinticinco de marzo de ese mismo año, un grupo de heredianos distinguidos dirigieron una nota al Ministro de Educación solicitando se asignara el nombre del ingeniero Sáenz Flores al nuevo colegio que abría sus puertas en Heredia. Poco tiempo después, la petición fue atendida.
En 1968 se estrenaron las primeras aulas y un año después, los espacios para practicar deporte. Poco a poco fueron creciendo hasta el día de hoy en el que el centro de estudios de segunda enseñanza es considerado como uno de los mejores de Heredia.
Conmemoración
El jueves once de abril pasado, autoridades del Liceo ingeniero Samuel Sáenz Flores, alumnos y profesorado aprovecharon la celebración del 168 aniversario de la Batalla de Rivas para iniciar las conmemoraciones del sesenta aniversario de la apertura del centro educativo.
En esa ocasión, estuvieron como invitados especiales familiares del ingeniero Samuel Sáenz Flores, quienes participaron de las actividades programadas para ese día.
El director, licenciado Henry Vásquez, destacó la relevancia de las celebraciones y anunció para este año una serie de eventos que fueron tradición en el Liceo y que por diferentes razones se dejaron de realizar. Además, aseguró que para este 2024, una representación del Liceo desfilará nuevamente en las actividades del quince de Setiembre en Heredia.
Homenajeado
En la actividad realizada el once de abril en las instalaciones del Liceo, se leyó una reseña de la vida y méritos del ingeniero Samuel Sáenz Flores.
Ingeniero civil graduado en Bologna, Italia e ingeniero sanitario graduado en Harvard (Estados Unidos), fue director de obras públicas, profesor del Colegio Superior de Señoritas y de la Escuela Normal de Costa Rica.
Además, fue regidor municipal, presidente de la Junta de Caridad, de la Junta de Educación y diputado. Apasionado por la enseñanza de las matemáticas, apoyó a muchos jóvenes en su aprendizaje, sobre todo a aquellos con dificultades económicas para acceder a la educación.