HOSPITAL GERIÁTRICO ENTREGÓ 157 PRÓTESIS DENTALES A DOMICILIO
Decenas de adultos mayores no tuvieron que desplazarse hasta el hospital Nacional de Geriatría y Gerontología para recibir su prótesis dental porque los odontólogos se organizaron y las fueron a entregar a sus casas, cumpliendo con todos los protocolos institucionales y nacionales ante la pandemia por covid-19.
Un total de 157 prótesis dentales fueron entregadas por el grupo de odontólogos tanto de ese centro especializado como por profesionales de distintas áreas de salud de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) que se unieron a esta iniciativa, con el propósito de que esta población tuviera las prótesis sin mayor demora.
La decisión de completar la confección de estas prótesis la adoptó el grupo, en virtud que la solicitud y las medidas se efectuaron antes de la emisión de una directriz por parte de las autoridades que suspendió las consultas y tratamientos dentales, por el riesgo de contagio del virus covid-19, por la cantidad de fluidos que se expelen durante los procedimientos odontológicos.
El doctor Luis Diego Giralt Apéstegui, jefe del servicio de Odontología del hospital Nacional de Geriatría y Gerontología, explicó que tras esa directriz se decidió continuar con la confección de las prótesis en el laboratorio que tiene el hospital y una vez que las concluyeron, se comenzaron a entregar.
Giralt Apéstegui dijo que «para muchos adultos mayores contar con una prótesis dental significa mejorar su nutrición, aumentar su peso, su inserción social y su calidad de vida, toda vez que la falta de dentadura afecta su proceso de alimentación y de socialización».
Recordó que el laboratorio de confección de prótesis dentales del hospital Nacional de Geriatría y Gerontología es de referencia nacional para la población adulta mayor y, por lo tanto, había pacientes a quienes se les entregó esta prótesis que residen en puntos distantes del país, entre ellos Nicoya y Costa de Pájaros.
Las prótesis de pacientes que residen en el Área Metropolitana fueron entregadas por el personal del hospital, mientras que a los pacientes que viven en zonas más alejadas se coordinó con las áreas de salud respectivas.
A cada paciente se le visitó y se le efectuó el control de masticación y ajuste de la prótesis a su boca, con ese objetivo se llevó un motor eléctrico portátil y en cada visita el equipo duró cerca de una hora.
El doctor explicó que técnicamente la entrega a domicilio no tuvo ninguna complicación, aunque logísticamente exigió una coordinación de visitas con los pacientes y con el grupo de odontólogos de otras áreas que los apoyaron.
La iniciativa, sin embargo, significó muchísimo para los adultos mayores puesto que no tuvieron que salier de su burbuja social, no tuvieron que exponerse tomando un bus para asistir al hospital ni tampoco efectuar ningún gasto de traslado.
Los equipos de trabajo que participaron en esta iniciativa si tuvieron que sortear inclemencias del clima, la amenaza de perros sueltos, las dificultades de llegar a algunas viviendas, sin embargo, todos mostraron su satisfacción por el servicio y los beneficios que le produjeron a los adultos mayores con su nueva prótesis.