Los vecinos de San Isidro han visto cómo se transformó el terreno baldío que por años solo lució un rótulo en el que se anunciaba que ahí se construiría la nueva clínica y ahora un enorme edificio se levanta en él.
Y es que la nueva clínica ya está prácticamente lista para estrenarse, la obra representa una inversión de ¢8.200 millones y viene a dar un giro completo a las instalaciones que ocupan actualmente.
La nueva clínica consta de cerca 4.500 metros cuadrados de construcción, acorde con las necesidades de salud de la población adscrita, especialmente relacionadas con los pacientes mayores de 65 años y aquellas personas portadoras de enfermedades crónicas, en instalaciones más cómodas, seguras y espaciosas que permitan elevar la calidad y la oportunidad en la prestación de los servicios.
Cumple con los requerimientos de la Ley 7600 y solventará los problemas de hacinamiento, inseguridad e incomodidad con la que se ofrecen los servicios actualmente. Además, facilitará a los vecinos no tener que ir hasta el Hospital de Heredia para realizar los exámenes de laboratorio, al contar con su propio laboratorio, algo clave en momentos de emergencia sanitaria en que se busca que las visitas al hospital sean solo por urgencia.
La nueva clínica contará con área de Nutrición, Odontología general, Trabajo Social, Enfermería, Sicología, Educación en Salud, Salud Ocupacional, Laboratorio Clínico, redes,
Validación de derechos, área técnica y administrativa, servicios administrativos, mantenimiento, y servicios generales, entre otros.
