Al café se le ha denominado “El Grano de Oro” debido a la prosperidad económica que le ha traído a Costa Rica desde sus inicios. El sector cafetalero ha sido parte importante de la historia y de la economía del país. Logró ser por muchos años la base de la actividad agrícola de Costa Rica, impulsando el desarrollo del país y de todas aquellas personas que viven de su cultivo.
Por ello, esta tarde el diputado liberacionista Wagner Jiménez Zúñiga junto al alcalde de Dota, Leonardo Chacón y un grupo de estudiantes de la Escuela San Rafael del cantón de Dota, presentaron a la corriente legislativa el proyecto de Ley que declara el café de Costa Rica como símbolo patrio en el desarrollo económico, social y cultural de nuestro país.
“Representa el esfuerzo, el trabajo diario en el campo bajo el sol, el trabajo del labriego sencillo, representa la economía de miles de familias en todo el territorio nacional, la estabilidad social, también el prestigio y la dedicación de realizar el mejor esfuerzo, para obtener la excelencia del mejor café del mundo”, mencionó el legislador.
Los Símbolos Nacionales permiten conocer las raíces nuestras, pero la vivencia de ellas, nos identifica como miembros de una comunidad y por tal razón se considera que el café debe convertirse en un símbolo patrio.
“Consideramos que es importante que el Primer Poder de la República lo convierta en un símbolo nacional. Debemos mantener la cultura de la producción del café y preservarla para las próximas generaciones. Nuestro país se distingue por la calidad del café en el concierto de las naciones, nos sentimos muy orgullosos, porque le ha dado reconocimiento mundial a nuestro país, al ser el productor de los mejores cafés del mundo, por lo tanto, deseamos darle un lugar privilegiado en la historia”.
La iniciativa contempla, además, que el Ministerio de Educación Pública incluya en los programas de estudio correspondientes, al café de Costa Rica como símbolo patrio.