El alcalde de San Rafael, Verny Valerio ha sido muy crítico con el servicio que están recibiendo los rafaeleños por parte de la Empresa de Servicios Públicos, especialmente durante la época seca en que los racionamientos han afectado a las comunidades, pero va más allá y asegura que debido al no otorgamiento de medidores de agua se está prácticamente obligando a las personas a irse a invertir y generar empleo en otros cantones, e incluso a vivir porque no se pueden segregar los terrenos para que los hijos, por ejemplo, puedan construir sus casas en los lotes que sus padres les dan.
¿Está peleado con la ESPH?
No estoy peleando con nadie, lo que insisto es que la ESPH debe asumir su compromiso y responsabilidad. La Ley 7789 dice que a la ESPH le toca dotar de los servicios de agua potable y electricidad y otros que no dan, a los cantones de San Rafael y San Isidro. Lo que exijo es que cumplan con ese compromiso. La ley no dice que puedan o podrán, sino debe dotar, no importa si el servicio es muy caro, debe hacerlo. No es si tienen plata o no, tienen que darnos el servicio y si no pueden, sean sinceros y nosotros buscaremos opciones y buscaremos quien puede darnos ese servicio esencial. Lo que pasa es que han dejado de invertir y no hay infraestructura suficiente para darnos el servicio de agua.
Voy a defender con las fuerzas posibles, que merecemos, requerimos y necesitamos la dotación del servicio hídrico en las mismas condiciones que el resto del país. Tenemos dos grandes problemas el de racionamiento y el de las restricciones.
¿Detállenos en qué consisten esos problemas?
El racionamiento lo entendemos por la época seca, pero no en la magnitud que se ha dado, porque hay comunidades que han pasado 4 días completos sin agua durante 18 horas al día. Comprendemos que cuando hay poco recurso hay que disminuir la cantidad, pero que se nos mida con la misma medida que a otros cantones. Sin entrar a pelear con nadie, sí exigimos que los racionamientos se regularicen y se hable con seriedad.
El problema de fondo, son las restricciones, porque hace 5 años se inventaron un acuerdo mediante el cual establecieron zonificaciones en San Rafael y San Isidro para establecer dónde dan y dónde no medidores, y simplemente establecieron zonas que pintaron de diferentes colores y deciden cuantos medidores dan.
En el centro de San Rafael solo 5 medidores, se deja sin efecto cualquier desarrollo constructivo habitacional. En San Rafael centro no pueden construirse urbanizaciones, ni condominios y eso ya es un impacto para el cantón, y no solo en las finanzas municipales, sino el impacto que genera este estado de incerteza donde propiedades que en nuestra normativa dice que sí pueden construir, la Empresa dicen que no hay medidores.
¿Los ingresos municipales han bajado?
Cuando hay un proyecto constructivo generan ingresos por los traspasos, segregaciones, permisos de construcción, y otros, por lo que ha habido impacto significativo de hasta 40% de ingresos libres, con los que realizamos la obra pública, pero el problema mayor es social, un estado de inseguridad jurídica, porque si ya teníamos algunas restricciones ambientales en el cantón, ahora con un acuerdo directivo nos convirtieron en parias en nuestra propia tierra, porque una propiedad sin agua no vale nada.
Hay propiedades que tienen la posibilidad de desarrollarse. Y en las zonas con más restricción ni siquiera se puede hacer una construcción, por ejemplo, me llamó una señora a quien le iban a dar el lote en Tierra Blanca, le van a prestar el dinero para hacer su casita, pero la ESPH le dijeron que no hay posibilidad de instalar un medidor, entonces no se puede hacer una segregación. La gente de San Rafael tiene tierra, pero no tiene el derecho fundamental de disponer de ella.
En algunos casos dice que es por ser de uso predominantemente agrícolas, pero vamos a pedir una paja para riego y cobran la misma tarifa que para una residencial, y no nos dan una paja de agua para agricultura.
¿Cuál el siguiente paso?
Estoy haciendo los análisis legales correspondientes para ver si pedimos la intervención de AYA, porque si ESPH no tiene la capacidad ni tiene infraestructura para darlo. No hay problema en los mantos acuíferos, sino habría que tener restricciones en toda la provincia. Lo que pasa es que no hay infraestructura para bombear el agua a diferentes partes del cantón, por la falta de pozos y le agregaría falta de planificación y capacidad al manejar el tema del acueducto, porque sabían que en la época seca las fuentes superficiales se iban a secar o quien no sabía que iba a haber fenómeno del Niño o la Niña, ¿y cuál era el plan B? Hacer racionamientos, es una charlatanería y los rafaeleños debemos frenarlo de una u otra forma.
El plan B no es hacer un embalse en diez años, como vamos a decirle a la gente de San Rafael o a los que vinieron a invertir en tierra, que compraron algo que no sirve para nada. Queremos que nos diga de una vez por todas si se pueden o no con el acueducto de San Rafael.
¿Le darán un plazo para que responda?
El consejo municipal, con la aprobación de cuatro regidores acordó pedirle a la ESPH que nos digan si pueden manejar el problema o no, pienso que como es la costumbre nos contarán un cuentito.
Pronto presentaremos una moción para pedirle al AYA que hagan una intervención del acueducto, que haga una valoración objetiva para saber si las inversiones en infraestructura y planificación han sido las adecuadas, sino tendremos que hacer lo necesario para que la gente de San Rafael tenga agua, ahora y las futuras generaciones. Los que compraron un lote para dárselo a sus hijos o para venderlo.
¿Si llegaran a un acuerdo con AYA para traspasar el acueducto, eso incluiría la generación de agua de San Rafael?
No tengo claro el panorama. Es un tema complicado que debemos hablar con sinceridad.
Cuando hicimos el traslado del acueducto y las propiedades fue con el propósito que nos brindaran un servicio de calidad y continuidad y si se está incumpliendo, una consecuencia lógica del posible traslado a otra institución es que todo lo que nosotros trasladamos le sea devuelto a la Municipalidad o a la empresa que nos vaya a brindar el servicio.
¿Se puede decir que se trasladarían de ESPH a otra empresa?
Lo que quiero es que ESPH nos diga con sinceridad si tiene capacidad, planificación, recursos, y posibilidad de dotar al acueducto rafaeleño de la infraestructura que necesitamos, si es así no pasa nada, porque en términos generales debo reconocer que desde que ESPH llegó a San Rafael ha habido un cambio en la calidad de vida de los ciudadanos, pero parece que llegamos a un punto donde la calidad ha decrecido. Siento que nos ven como ciudadanos de segunda categoría, tal vez no les interesa que seamos sus clientes, entonces mejor nos sentamos a negociar.
¿Para cuándo tendrían esa respuesta?
El acuerdo no lleva un plazo, pero en este país de acuerdo con el derecho de petición y pronta respuesta, el plazo máximo para responder es de un mes, esperaría que en un mes tengamos soluciones. Lo que no quisiera es que ahora que ya empezó a llover se nos olvide el problema y dentro de cinco meses cuando empiece la época seca volvamos otra vez con el racionamiento. Y me preocupa mucho que seamos tan cortoplacistas. Estoy pensando en las restricciones cómo afecta el empleo al no haber proyectos de construcción, la seguridad jurídica ¿quién va a comprar si tiene uso de suelo que dice que puede construir, o segregar, y a la hora de llegada no le dan un aparatito que se llama medidor, aunque por el frente de la propiedad pasen las líneas de agua?
Parece qué no se percataron de los efectos que un acuerdo de esa naturaleza tiene para una población de 55 mil personas, porque ese tipo de acuerdo vacía de contenido el valor de una propiedad es fácil decir que, por temas ambientales, lo raro es que solo nosotros y San Isidro y es el mismo acueducto, ¿por qué a otros no les ponen ni media restricción?