Cuando tenemos niños en la casa, es natural querer protegerlos, chinearlos y consentirlos. Sin embargo, es importante que se le asignen tareas de acuerdo con sus edades, pues de esta manera se desarrollan diferentes habilidades que requieren para su vida.
Hace poco tuve la experiencia de conversar con una mamá que tiene una niña de cinco años, la cual es hija única. La niña en su casa no tiene ninguna obligación, ya que su madre incluso la baña y la viste; acciones que por su edad ya debe de realizar de forma supervisada pero independiente. Esta situación trajo consigo diferentes consecuencias en la conducta de la niña, pues sus procesos de desarrollo y aprendizaje se han visto influenciados por esta situación.
Es importante que se les asigne tareas sencillas a los niños con respecto a su edad, de manera que vayan construyendo paulatinamente su independencia, y a su vez desarrollando habilidades motoras, cognitivas y de lenguaje. Por ejemplo, las habilidades motoras tanto gruesas como finas, se trabajan con actividades diarias que son sencillas y no requieren de una inversión en materiales didácticos costosos, que no están al alcance de todos.
Algunas responsabilidades que pueden realizar los niños para trabajar las diferentes áreas del desarrollo, y su independencia son: tender su cama, recoger sus juguetes y mantenerlos en orden, bañarse solos (pero con supervisión de un adulto), elegir la ropa que desea ponerse, vestirse solo, lavar su plato y vaso (con supervisión de un adulto), llevar su ropa al sesto de ropa sucia, ayudar a alistar su bolso para ir al kínder o escuela (esto es recomendable realizarlo el día anterior), realizar sus tareas académicas con ayuda y supervisión de un adulto.
Para que los niños no olviden sus obligaciones, se puede elaborar una ficha grande en la que ellos marquen las tareas que ya realizaron. Para esta estrategia, se puede utilizar una cartulina grande o un cartón de presentación; luego se divide en las tareas que debe de realizar por día el niño, y se emplastica con plástico adhesivo transparente, para que así puedan utilizar marcadores de pizarra para que la ficha les sirva para todas las semanas y solo se borre para iniciar la semana nueva; esta es una opción para las personas que no pueden comprar una pizarra acrílica. Por lo tanto, las personas que puedan utilizar una pizarra acrílica solamente escriben las responsabilidades y los días de la semana, para que los niños marquen las tareas realizadas.
Es importante tener presente que, para toda estrategia que se vaya a trabajar en conjunto con los niños, ellos deben tener participación y opinión en la toma de decisiones, ya que de este modo es más significativo para ellos, y se respetan sus derechos. Además, se promueve en ellos la importancia de que tomen decisiones y que sus opiniones y pensamientos son importantes. Por lo que, los niños pueden realizar dibujos que representen las responsabilidades que deben cumplir, y de esta manera las reconocerán, aunque no sepan leer.
