Lesly Mora Artavia
Pedagoga
La situación actual que todos estamos viviendo, ha traído angustia, dolor, miedo, muchos sentimientos y emociones más que no son tan positivos para nosotros como sociedad. Sin embargo, de todo lo que nos sucede en la vida, tenemos que adquirir un aprendizaje, ya que todo pasa por algo y tiene un propósito.
Lo importante y esencial para lograrlo es: “cambiar o ajustar los lentes con los que vemos la vida”.
Esa frase suena fácil, pero cuando la comenzamos a ponemos en práctica, nos damos cuenta de que no es tan fácil ni sencilla esta tarea.
Primero tenemos que adquirir una conciencia clara de lo que significa y representa, para cada uno de nosotros, pues interiorizarlo requiere su tiempo y ponerlo en practica es todo un desafío, porque es una lucha con nosotros mismos, por lo que podemos sabotearnos con más facilidad. Pero cuando logramos ajustar nuestros lentes, nos damos cuenta de que la vida nos esta poniendo pruebas para que trabajemos en una mejor versión de nosotros mismos. Sí, una versión que no conoceríamos, ni tampoco meses atrás creeríamos posibles.
La vida nos esta impulsando a salir de nuestra zona de confort, nos obliga a reinventarnos, a enfrentar nuestros miedos, a valorar el trabajo que cada persona realiza y hasta ahora nos damos cuenta de lo fundamental que es su labor.
La vida nos está enseñando a valorar las pequeñas cosas, a fortalecer los vínculos con la familia, porque antes el sentarnos a conversar en las tardes no era costumbre porque no había tiempo, teníamos otros planes que creíamos que eran mas importantes. Porque jugar con la familia los juegos de mesa creíamos que era aburrido, y olvidamos lo divertidos que eran y cuanto lo disfrutábamos.
Entonces si ajustamos poco a poco nuestros lentes vamos a ver mucho mejor la vida y lo que es realmente importante.
Además, la vida nos esta transformando en mejores seres humanos, nos aleja del egoísmo, porque ya no vemos solo nuestras necesidades, sino también las de las demás personas y pensamos en cómo apoyarlos en estos tiempos donde a muchos, la situación económica se les ha complicado más, pues siempre han existido familia que viven de lo que se ganan en el día a día, pero hasta este momento somos más sensibles para darnos cuenta de las distintas realidades a las que muchas familias se enfrentan.
Por lo que Agradezco tener una casa para vivir, alimentos para comer, a mi familia para compartir, apoyarnos y reír, mi trabajo par salir adelante, y me agradezco a mí, por ser fuerte y enfrentar esta situación, por reinventarme, por salir cada día de la zona de confort, por confiar en que puedo lograr lo que me proponga, por aprender a valorar las pequeñas cosas, por transformarme en la mejor versión de mí.
Y todo esto solamente por “ajustar los lentes con los que veo la vida”.