El sacerdote de la Parroquia Inmaculada Concepción de Heredia, Luis Enrique Guillén, promovió durante todo el mes de mayo el rezo del rosario en familia para pedir por el fin de la pandemia de covid.
Y este domingo 30 de mayo salieron a hacer el rosario frente al Hospital de Heredia, sentados al lado de la calle, acompañados por la fe y el amor, el padre Guillén y el seminarista Mario Molina, rezaron con gran devoción por los trabajadores del hospital San Vicente de Paúl, así como por los pacientes que permanecen internados por diferentes dolencias.
No podían faltar los cantos, de los que se encargó Adrián Murillo, uno de los grandes colaboradores de la Parroquia.
Mientras muchos descansaban en sus casas, casi un centenar de personas seguían el rosario por las redes sociales de la Parroquia Inmaculada, algunos de ellos tal vez desde una cama de hospital, entregando sus dolencias en manos de Dios y la Virgen.
En tanto el equipo parroquial rezaba junto a una imagen de la Virgen de los Ángeles, en la acera frente a la entrada del centro médico, sin que el frío mellara su fe.
