Mientras muchas personas viajaban tranquilas en el autobús, incluso algunas dormidas, otro pasajero los puso en alto riesgo, al trasladar dentro de la unidad de transporte público un cargamento de pólvora.
El hallazgo se dio por oficiales de la Fuerza Pública, destacados en el cantón de Upala, quienes durante un control de carretera hicieron la revisión del autobús y encontraron el cargamento de pólvora, en su mayoría artefactos explosivos de tipo triquitraques de gran capacidad destructiva.
Los oficiales descubrieron en el compartimento de maletas nueve bolsas jardineras y dos cajas medianas, la cuales contenían 234.468 unidades de pólvora explosiva que se trasladaba en el autobús que viajaba de Upala a San José.
En virtud del riesgo que estaban corriendo los pasajeros y el conductor, así como todas las demás personas que se encontraban en la ruta que debía recorrer el vehículo intervenido en caso de que se suscitara una explosión o incendio, el material pirotécnico fue incautado a fin de ser destruido.
Aparte de que se trata de una mercancía contrabandeada, presuntamente desde Nicaragua, la importación y venta de artículos pirotécnicos explosivos están prohibidas en el país según el artículo 93 de la Ley de Armas y Explosivos.
Dicha normativa establece penas de hasta siete años de prisión para quienes, de manera irregular, transporten, expendan o introduzcan pólvora explosiva al país.
