Ante los recientes acontecimientos climáticos presentados en el Gran Área Metropolitana la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) recuerda la importancia de reportar todos aquellos árboles en la vía pública que por su condición pueden interferir en la red eléctrica.
Cada año, la CNFL poda unos 190.000 metros lineales de árboles en la GAM con el fin de asegurar la calidad y continuidad del servicio.
“Estas labores se realiza durante todo el año, pero se intensifica en el verano, para evitar que las lluvias y vientos del invierno generen interrupción del servicio a nuestros clientes por caídas de ramas”, comentó Luis Fernando Andrés Jácome, director de Distribución de la CNFL.
Con el desrame responsable de la vegetación, la CNFL busca una coexistencia entre la red eléctrica y la naturaleza, aplicando las mejores prácticas de la arboricultura, sin que esto afecte la vitalidad y preservación de los árboles en el medio urbano.
No manipule la red. “Si un cliente nota que un árbol cuenta con ramas muy cercanas a la red eléctrica, es muy importante que las reporte a la CNFL por medio de la línea gratuita 800-ENERÍA (363-7442) o vía mensaje en las redes sociales de la empresa, ya que las consecuencias de esta manipulación podrían generar afectaciones significativas en la salud de las personas”, afirma Andrés Jácome.
El conocimiento técnico para la manipulación de árboles cercanos a la red eléctrica es vital a la hora de prevenir eventuales electrocuciones. Una electrocución, puede generar desde una quemadura de segundo grado (ampollas sobre la piel) hasta afectaciones en órganos vitales como el corazón o los riñones.