En medio del dolor que embarga a todo el cantón de Desamparados, ha resurgido una de sus mayores fortalezas: la solidaridad. Los vecinos del distrito de San Juan de Dios han demostrado, una vez más, que ante la adversidad, la comunidad se convierte en una sola familia.
La madrugada de este domingo, minutos antes de las seis de la mañana, un incendio consumió una vivienda de dos plantas en San Juan de Desamparados. En el primer nivel funcionaba una pulpería, mientras que en la segunda planta residía una familia que no logró escapar de las llamas. Cuatro personas perdieron la vida en la tragedia: una madre de 33 años, de apellido Chacón, y sus tres hijos, una niña de 3 años y dos niños de 9 y 12 años.

El padre de los menores, Andrés Guillén, quien es oficial de la Fuerza Pública, se encontraba fuera de casa al momento del siniestro. Las causas del incendio permanecen bajo investigación por parte del Cuerpo de Bomberos, aunque se presume que las condiciones de la estructura —que funcionaba como cuartería y negocio— podrían haber influido en la rápida propagación del fuego.
Ante esta dolorosa pérdida, la respuesta de la comunidad no se hizo esperar. Empresas locales como la Funeraria Divina Aurora y la Funeraria Árbol de Vida se unieron al gesto solidario y anunciaron que cubrirán todos los gastos del funeral, como muestra de apoyo y respeto hacia la familia afectada, según informó el medio cantonal El Desamparadeño.

El Ministerio de Seguridad, así como otras instituciones han manifestado su pesar y enviado mensajes de condolencias, reconociendo el profundo impacto de esta tragedia no solo para el cantón, sino para todo el país. Para quienes deseen brindar su ayuda a la familia, pueden comunicarse con el Subintendente Bernal Arroyo, al número 8874-0218.
Hoy, San Juan de Dios llora a sus hijos, pero también se abraza con fuerza, recordándonos que en los momentos más oscuros, la luz de la solidaridad sigue encendida.



