El pasado fin de semana, gracias a las labores de inteligencia y con la ayuda de un perro especializado en detección de drogas, la policía aeroportuaria notó una carga sospechosa, por lo que de inmediato se coordinó con la Policía de Control de Drogas (PCD) y la fiscalía para verificar unas cajas con varios artículos.
Al realizar la inspección en, uno de los casos, se encontraron ocultos varios envoltorios con un peso total de 390 gramos de cocaína. En otra inspección, fueron hallados un total de 505 gramos de esta misma droga, para un total de 895 gramos.
«Las autoridades se mantienen alertas en todo momento, con el fin de que los narcotraficantes no logren enviar drogas por medio de vuelos internacionales», aseveró la vocera de la Policía Aeroportuaria.