Luego de seis meses de investigar la desaparición de la joven Alisson Bonilla, esta mañana el director del OIJ afirmó que ya no investigan una desaparición sino un homicidio. Y tras la detención el principal sospechoso anoche, ahora se centran en localizar el cuerpo.
La investigación estuvo dirigida a encontrar a la joven desde el inicio y es hasta hoy, que el OIJ da a la víctima por fallecida y siguen las pistas de la investigación para dar con el cuerpo y concluir el caso.
El sospechoso no había sido detenido antes porque esperaban que sus movimientos los guiaran hacia dónde había abandonado el cuerpo de Allisson Bonilla, pero ante la probabilidad que el sujeto huyera, decidieron detenerlo anoche en Ujarrás.
La joven Allison Bonilla viajaba de Cachí hacia Ujarrás en un autobús, y caminaba aproximadamente tres kilómetros para llegar a su casa, fue durante el trayecto que la joven se comunicó con su novio y le habría indicado que estaba siendo seguida por dos sujetos a los que ella se refirió como “pintas”, después de ese momento no se supo más de ella
Según las declaraciones del director del OIJ, la primera pista que siguieron fueron los anteojos medicados de la joven de apenas 18 años, y eso permitió ubicar un rastro de sangre de unos 140 metros hacia el interior una finca localizada a la vera del camino por donde transitaba la noche de su desaparición. (video)
Los análisis realizados a la sangre permitieron encontrar ADN de ella en esa sangre, al igual que en la encontrada en el vehículo incautado al sospechoso en los primeros allanamientos realizados en la vivienda en Ujarrás.
“La hipótesis de trabajo se identifica con un homicidio y seguiremos tratando de localizar el cuerpo de la joven y concluir el caso”, aseveró Walter Espinoza, quien detalló que han trabajado muy de cerca con la familia de la víctima.
El sospechoso del crimen es un vecino de la víctima de apellidos Sánchez Ureña, de 28 años, y el móvil del homicidio se mantiene en investigación.