En estos momentos el Organismo de Investigación Judicial se encuentra realizando la búsqueda del cuerpo de Allison Bonilla, en San Jerónimo de Cachí, en un botadero clandestino conocido como Guatuso, ubicado a unos tres kilómetros de la casa de la joven.
La Oficina de Prensa del OIJ confirmó que recibieron información que indicaba que en esa zona podría haber sido abandonado el cuerpo de la joven de 18 años, desaparecida desde hace seis meses.
El lugar es un guindo de más de 300 metros de profundidad y el cuerpo podría encontrarse en el fondo del barranco al cual están tratando de descender con cuerdas con el apoyo de voluntarios con conocimiento en rapel.
Según versiones extraoficiales, el principal sospechoso del crimen Nelson Sánchez, detenido anoche habría guiado a las autoridades hasta ese punto.