Una joya herediana recuperó su brillo, gracias a la inversión realizada por el gobierno local, se trata del edificio de la Comandancia de Heredia, emblemático edificio declarado patrimonio nacional.
El edificio logró recuperar su belleza, y al mismo tiempo, mejorar las condiciones para el personal que se encarga de la seguridad del cantón central y que permanece en este edificio.
Las duchas que en el pasado estaban cubiertas de moho y hasta con bolsas de plástico para que el personal se bañara, ahora cuentan con azulejo y nueva grifería.
Los pasillos oscuros y fríos ahora cuentan con una adecuada iluminación, los pisos donde destacan las piedras andesitas también recuperaron su belleza. Incluso la base de ladrillo de las paredes volvió a ser visible.
El proyecto tuvo una inversión aproximada de ¢330.000.000, se realizó en seis meses respondió a la urgente necesidad de atender daños provocados por la humedad y la falta de ventilación en diversas áreas del edificio. Las labores incluyeron la reparación y resane de cubiertas, paredes, pisos, acabados, puertas y ventanas, así como mejoras sustanciales en las instalaciones sanitarias.
Además de las obras de restauración, se realizaron intervenciones nuevas como la ampliación del cuarto de servidores, la construcción de bodegas adicionales y la habilitación de un área techada para ejercicios en el patio norte.
Este pequeño gimnasio fue elaborado por los mismos efectivos policiales, quienes, con piezas donadas, le fueron dando forma a las máquinas para ejercitarse y así mantenerse en mejor condición física para hacerle frente a sus labores, además, es un espacio para liberar estrés luego de la jornada laboral, cuándo debido a los horarios, deben permanecer en la Comandancia.
Como parte de la restauración, ajustaron las salidas de emergencia conforme a las recomendaciones del Departamento de Bomberos
Esta restauración representa un esfuerzo por preservar la memoria colectiva y reforzar el sentido de pertenencia de la población herediana. La Comandancia de Heredia no solo es un edificio de gran valor histórico, sino también un espacio clave para la seguridad y el bienestar de la comunidad.
En el acto de inauguración participó el ministro de Seguridad Mario Zamora, la alcaldesa de Heredia Ángela Aguilar, miembros del concejo municipal, así como representantes de instituciones públicas y sector privado.
