La Conferencia Episcopal de Costa Rica comunicó este jueves, a una semana de iniciar la Cuaresma, que la prohibición establecida el año anterior por la pandemia sigue vigente, por lo que todas las procesiones, Vía Crucis y otros ejercicios de piedad en forma pública durante la Cuaresma y Triduo Pascual están suspendidas.
No significa que no se realicen las celebraciones propias de la Semana Santa, que se llevan a cabo dentro del templo, para lo cual se debe respetar el aforo establecido para cada tempo y seguir los lineamientos del Ministerio de Salud.
La costumbre de los Siete Lunes, por ejemplo, puede realizarse como una extensión de la Eucaristía, sin exceder los tiempos prudenciales que ha instruido el Ministerio de Salud.
“En cuánto a la visita a los enfermos y personas de avanzada edad, tanto de los sacerdotes como d ellos ministros extraordinarios de la Comunión, al ser un grupo de riesgo debemos recordar que se trata de personas de alto riesgo. Hemos insistido desde el protocolo de apertura de los templos y luego en otros lineamientos de orientación para administrar el Sacramento de la Unción de los enfermos, que se realice en casos de extrema necesidad. Sin embargo, la gracia primera de este sacramento es una gracia de consuelo, de paz y de ánimo para vencer las dificultades propias del estado de la enfermedad grave o de la fragilidad de la vejez, por ello, estamos llamados en este tiempo a aumentar esta cercanía”, indica el comunicado de la Conferencia Episcopal sobre las visitas a los enfermos.
Los obispos hacen un llamado a promover el sacramento de la Reconciliación en un lugar adecuado y siguiendo los protocolos ya establecidos, de manera que tanto los penitentes como los sacerdotes resguarden su salud, por lo que no habrá jornadas de confesiones masivas como las tradicionales liturgias penitenciales, en que varios sacerdotes visitaban los templos para llevar la confesión a gran cantidad de personas.
“Rogamos al Señor que, por intercesión de la Santísima Virgen María, Madre de la Iglesia, y de San José, su Esposo, nos conceda vivir este tiempo de Cuaresma como un camino de fortalecimiento bautismal. De modo que, al llegar la Pascua, podamos renovar nuestra adhesión a Cristo resucitado, que se nos hará el encontradizo con la misma discreción y eficacia que otrora en el camino de Emaús”, finaliza el comunicado de los obispos.
¿Y EL MIÉRCOLES DE CENIZA?
El Miércoles de Ceniza con que inicia el tiempo de Cuaresma será el próximo 17 de febrero, y al estar permitidas las misas en los templos, la imposición de la Ceniza, si es permitida, pero se realizará depositando ceniza en la cabeza de la persona, y la tradicional cruz en la frente.
No se dirá a cada persona la frase “polvo eres y en polvo te convertirás” se dirá una sola vez para todos los presentes y luego en fila o manteniéndose en sus lugares, cómo lo establezca cada sacerdote, se acercarán a colocar la ceniza sobre la cabeza de cada uno. Siempre utilizando el cubrebocas.
En las diferentes comunidades los sacerdotes se han organizado para ofrecer más misas de lo usual, de manera que las personas que no puedan ingresar al templo por el aforo establecido, tengan la posibilidad de esperar la siguiente y no quedarse sin asistir a la misa.
