Los arrecifes de coral son de gran importancia para mantener la biodiversidad de nuestros mares, incluyendo las especies de consumo humano, además de proteger las costas contra la erosión y la fuerza de las olas.

Así lo han entendido voluntarios, científicos y autoridades de nuestro país, quienes están impulsando la siembra de coral en las costas guanacastecas para revertir el daño causado por el ser humano a estos frágiles ecosistemas marinos.
El fin de semana, un contingente conformado por voluntarios de la Reserva de la Fuerza Pública, oficiales del Guardacostas y vecinos, realizaron una operación para sembrar coral en las aguas de Sámara, cantón de Nicoya, Guanacaste.
Massimo Gambari, un miembro de la Reserva de la Fuerza Pública, de origen italiano y quien es un enamorado de nuestra biodiversidad y de Costa Rica en general, ha sido uno de los más entusiastas colaboradores de este proyecto, el cual es impulsado por el INA, Minae, la UCR y otras instituciones.
El director de la Estación de Guardacostas de Flamingo, comandante Luis Diego Castro Baldizón, indicó que en esta oportunidad sembraron 40 fragmentos de coral juvenil, cuyo crecimiento será monitoreado por el INA y vecinos de Sámara.
Según reseño Carlos Pérez Reyes, funcionario del INA, la iniciativa surgió hace dos años por parte de funcionarios del Minae, quienes plantearon la necesidad de realizar un proyecto de restauración de corales en playa Sámara, cantón de Nicoya.
A raíz de ello, el INA ha brindado cursos de jardinería de corales a los vecinos de Sámara, además como parte del proyecto se han venido probando diferentes técnicas y materiales para efectuar la siembra del coral, la cual se realiza a 29 metros de profundidad.
Como una forma de agradecimiento y de integración de los colaboradores con la naturaleza, el nombre de los participantes en este proyecto es escrito en las bases donde se coloca el coral y colocado en el fondo del mar.
La Reserva de la Fuerza Pública, así como el Servicio Nacional de Guardacostas, reiteraron su compromiso con las comunidades guanacastecas para seguir trabajando, de manera coordinada con ellas, a fin de seguir apoyando estas iniciativas que favorecen la conservación del ambiente.