Los Heredianos que pintan canas recuerdan con claridad la hazaña de José Barrientos, el primer Herediano en traer un vehículo a las calles del cantón y también el primer costarricense en emprender el viaje por tierra rumbo a Estados Unidos en su carro un Studebaker modelo 1929.
Don Juan Ramón Sánchez lo conoció gracias a su padre, Ramón Sánchez, quien en esos años fue taxista junto a don José Barrientos, y participó en la despedida que le hicieron con bendición incluida, en Heredia, el 20 de enero de 1949, cuando partió hacia el norte en su carro adaptado para enfrentar el desafío.
Para muchos era una locura, para otros una vagabundería, según recuerda don Juan, pero para muchos como él, fue una hazaña, porque abrió camino dónde no existía, tanto así que en Estados Unidos fue recibido como un héroe el 27 de marzo de 1946, cuando culminó la travesía.
“En esos tiempos no había carretera, iban abriendo trocha entre la montaña, tampoco había gasolineras como ahora, por eso este señor adaptó su carro con dos tanques más de gasolina, uno bajo el asiento de él y otro atrás, en un carro de 1929, carros con llantas de madera y hule relleno, él se las ingenió y le puso 17 galones en uno y otro de 20 más el que llevaba. Salió con Manuel Sánchez, quien lo acompañó hasta México, de ahí continúo solo”, recuerda don Juan Ramón.
Y es que las historias de este aventurero Herediano fueron plasmadas con su propia mano en papel porque soñaba con publicar un libro, pero no contó con el respaldo para lograrlo y así quedaron solo los cuatro borradores de sus travesías, los cuales don Juan Ramón consiguió de una de las hijas, Julieta, quien conserva entre sus recuerdos mucho de las cosas de su padre ya fallecido.
“Yo estaba muy pequeña tal vez en segundo grado cuando él hizo ese viaje, y cuando regresó la gente hacía fila en el parque para oírlo contando las historias. Me parece que es algo que él merece porque en Heredia todo mundo comentaba de ese viaje. muchos decían que seguro estaba mal de la cabeza porque irse tal vez con poquita plata y sin saber bien el trayecto porque no había carretera tenían que ir haciendo la trocha, ir cortando árboles, dormir en el carro. Él decía que se le arrimaban algunos animales y ellos pasaban bien encerrados en el carro. Fueron muchas cosas las que pasó para cumplir su sueño y me alegra que ahora se lo quieran reconocer”, comentó Maruja Barrientos, una de sus hijas.
Propone bautizar puente de pirro
Rescatar la hazaña de José Barrientos es una tarea que don Juan Ramón intenta por segunda vez, la primera fue en 1969 cuando presentó un proyecto para que la carretera Interamericana llevara el nombre del Herediano y no lo logró.
Pero al enterarse de los proyectos de la Municipalidad de Heredia para dotar a Heredia de un nuevo y más amplio puente sobre el Río Pirro en la entrada a Heredia, muy cerca de dónde vivía don José Barrientos, no dudó en tocar las puertas nuevamente.
“Me reuní con la vicealcaldesa, doña Olga Solís y muy amablemente me escuchó, y ofreció su apoyo porque le parece importante rescatar la historia, algo que no debe perderse, porque todos los adultos mayores Heredianos sabemos quien era don José Barrientos, pero ya las nuevas generaciones no lo van a saber”, comentó.
Considera que la hazaña es importante rescatarla, ya que fue un Herediano la primer persona en abrir la ruta por Centroamérica en medio de la selva y marcó así el camino para comunicar por tierra los países y eso es un orgullo.
“Me contaba que tuvo muchos problemas al salir de Costa Rica le pedían muchos documentos y después en los demás países ninguna autoridad lo molestó más bien se quedaban extrañados y en Managua fue recibido con mucho entusiasmo, incluso le daban 50 céntimos por darles la vuelta en el carro por el centro, y él aceptó porque así conseguía dinero para comprar más gasolina. Eran muchas las historias que él contaba, considero que es un héroe”, detalló don Juan Ramón, quien confía que esta vez la iniciativa sí tenga acogida para hacerle un reconocimiento, aunque sea póstumo.
La propuesta fue planteada a la vice alcaldía dónde será valorada y de ser viable la trasladarán al Consejo Municipal dónde una comisión la analizará, el proceso está en sus primeros pasos, al igual que la ampliación del puente, pero al avanzar simultáneamente, le da más posibilidades de concretarse.
Quienes sí le hicieron un homenaje en vida fueron los integrantes de Auto club Fénix de Heredia, integrantes por enamorados de los autos antiguos clásicos y deportivos, en abril del 2000, como pionero del automovilismo en Costa Rica.
“Es sumamente importante, para mí fue un personaje de lo más emblemático que ha tenido Costa Rica y Heredia, por la osadía de atravesar todo Centroamérica, México y llegar a Estados Unidos sin carretera, eso es admirable”, comentó Ronald Villalobos, del club de autos antiguos.