El Gobierno de la República condenó de manera enérgica los actos de violencia que se suscitaron ayer por la tarde cuando un grupo de personas, presumiblemente anti vacunas, entraron a la fuerza a las instalaciones del hospital San Vicente de Paul, en Heredia, al tiempo que respalda la denuncia que ante el Ministerio Público efectuará la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), para que se efectúen las investigaciones correspondientes y sienten responsabilidades.
Para el Gobierno es intolerable que se haya puesto en riesgo al personal de salud de ese centro médico y a los mismos pacientes que estaban en ese recinto. A la vez, deplora las expresiones en contra del personal médico utilizadas por parte de algunas de las personas que irrumpieron al hospital, toda vez que siempre ha destacado el enorme trabajo que desde el inicio de la pandemia el personal de primera línea de atención de la emergencia ha venido realizando.
De igual manera agradece la respuesta dada por la policía para controlar la situación en el centro médico, que permitió la detención de 6 personas, quienes fueron remitidas a la Fiscalía de Flagrancia de Heredia.
Además, el Ejecutivo deja claro que se actuará con firmeza ante cualquier acto similar al suscitado esta tarde, ya que se tendrá cero tolerancia ante invasiones que se puedan dar a instalaciones médicas u otras y que atenten contra la integridad y salud del personal y sus usuarios.
El Ejecutivo reafirmó su posición de que atender las medidas sanitarias, cumplir con los protocolos y completar el esquema de vacunación es la mejor defensa contra el Covid-19 y la vía correcta para superar esta pandemia.
Las autoridades exhortan a los padres de familia para que lleven a vacunarse a los niños y niñas entre los 5 y 11 años, grupo que se ha priorizado para ampliar la cobertura de la vacunación contra el COVID-19.