Con la autorización del Ministerio de Salud y cumpliendo con el protocolo sanitario establecido, el INA inició la primera fase de apertura en su retorno gradual a los servicios en modalidad presencial, unido a los virtuales y no presenciales que se han brindado durante todo el tiempo de pandemia.
Se trata de un plan que contempla la aplicación de pruebas de certificación de Turismo de Aventura (Rafting, Cables y Cuerdas), las pruebas del programa Básico de Embarco y las pruebas pendientes del programa Asistente de Manufactura en la Industria Médica.
En el primer caso se trata de 168 guías de turismo que requieren este requisito para obtener el respectivo permiso que emite el Instituto Costarricense de Turismo (ICT). Se convocan grupos de 10 estudiantes por día quienes presentan 2 pruebas escritas. Previo a esto recibieron el material y una tutoría virtual como preparación para las pruebas que se aplican en las sedes del INA en Turrialba, Orotina, La Fortuna, y Limón.
También realizarán las pruebas del programa Básico de Embarco a 106 estudiantes de todo el país, quienes llevaron la parte teórica de forma presencial antes de la pandemia y tenían pendientes las pruebas que se realizaron en el Centro Especializado Náutico Pesquero, en Puntarenas.
En este caso se les convocó de forma individual o en grupo de máximo 5 estudiantes, según la prueba a realizar: Técnicas de supervivencia personal, Prevención y lucha contra incendio, Primeros Auxilios Básicos, Seguridad personal y responsabilidades sociales.
Se aplicarán las pruebas pendientes para el programa Asistente de Manufactura en la Industria Médica. Se trata de 81 estudiantes quienes serán convocados, en lo que resta del año, en grupo de 6 por día. Este programa va dirigido a personas en condición de vulnerabilidad y está enfocado en un área de alta demanda en mercado laboral.