La antología Los hijos del fuego es un homenaje al folklore y a las tradiciones narrativas de Latinoamérica, compilada y editada por Victoria Marín Fallas y Félix Alejandro Cristiá a través de una convocatoria efectuada por la Revista Virtual Quimera. Este libro reúne relatos que exploran el terreno místico de las leyendas, mostrando cómo estas narrativas siguen vivas en la memoria colectiva. La obra es una celebración de las historias que, como apunta Félix A. Cristiá en el prólogo, son “hijas del fuego”, evocando las primeras narraciones que dieron sentido a la existencia humana.
Identidad y narración: el alma de la leyenda
El prólogo se erige como una reflexión filosófica y antropológica sobre el mito y la leyenda. Se argumenta que estas narraciones surgieron como un intento de ordenar lo desconocido, otorgando identidad a través de las historias contadas alrededor del fuego. Mientras el mito “funda sociedad, valores, identidad originaria”, la leyenda trasciende este propósito para adentrarse en la cotidianidad. La antología refleja esta transición, recopilando historias que, aunque están impregnadas de elementos sobrenaturales, ocurren en contextos mundanos, como un pueblo olvidado, una calle oscura, un campo abierto o una simple casa de huéspedes.
El libro está compuesto por 20 relatos, escritos por autores provenientes de distintos países de Hispanoamérica, que abordan temáticas variadas, desde espíritus que emergen para proteger o castigar, hasta misterios que rondan objetos o lugares cargados de simbolismo. Estas historias son narradas con un tono que varía desde lo profundamente poético hasta lo visceral y directo, capturando la riqueza y complejidad del folklore hispanoamericano.
Escenarios cotidianos, naturales, modernos, mixtos, como los territorios mismos que conforman el continente americano, son evocados a través del libro. Ya sea desde el humor o desde el terror, hacen su aparición figuras y criaturas tan familiares como los duendes (Los duendes de la higuera), el Cadejos, la bruja (Un plato con sal), o el vudú (De donde son los difuntos).
Una mezcla de lo ancestral y lo contemporáneo
Lo que destaca en Los hijos del fuego es su capacidad para conectar lo ancestral con lo contemporáneo. En su análisis del folklore, Cristiá señala que la leyenda se “alimenta de la oscuridad y de la indeterminación”, una característica que los cuentos reflejan a través de atmósferas cargadas de misterio.
Relatos como Pueblo Molles o La casa de huéspedes enfatizan este vínculo entre el pasado y el presente, mostrando cómo las leyendas evolucionan para adaptarse a las preocupaciones modernas, sin perder su esencia originaria. La mascarada, por Laura Severino Mora, narra una historia que mezcla tradición y desesperación en un entorno cotidiano, donde las máscaras se convierten en símbolos de las preocupaciones más profundas del ser humano. En el medio del salar, de Alfredo Arnez Valdés, se lleva a cabo en el árido desierto, un relato sobre la soledad y las extrañas apariciones que acechan a los viajeros. El huevo del diablo, de Mario Galván, relata una historia de avaricia y castigo donde un objeto aparentemente simple desata una cadena de eventos trágicos.
El libro tuvo un tiraje de 100 ejemplares que se distribuyen de manera gratuita en la librería Patio Abierto y en la Federación de Estudiantes de la UCR. La descarga gratuita del libro en su versión digital está disponible en la página web de la Revista Virtual Quimera.
Los Hijos del Fuego no solo ofrece una lectura fascinante, sino que también sirve como un recordatorio del poder de la narración oral para preservar y reinventar identidades culturales. Es un libro imprescindible para quienes desean explorar la riqueza de las tradiciones hispanoamericanas a través de una narrativa fresca y profundamente evocadora.
La Revista Virtual Quimera es un proyecto independiente que desde 2018 promueve la difusión de iniciativas culturales y educativas. Su enfoque abarca la literatura, la historia, el folclore y las tradiciones culturales. A través de sus publicaciones, busca reconciliar valores de universalidad y diversidad, destacando la riqueza de las culturas antiguas y su impacto en el pensamiento contemporáneo.