Este domingo gran cantidad de familias llegaron a la Parroquia Inmaculada Concepción de Heredia con sus mascotas y no solo para asistir a misa, sino para compartir la fiesta en los jardines.
Luego de las misas de 9 y 11 de la mañana, el padre Luis Enrique Guillén, armado con una «ramita» de ciprés y un estañón de agua bendita, comenzó a rociar con agua bendita a perros, gatos, pájaros y hasta un ratoncito.
La cimarrona y la mascarada completaron la fiesta de los heredianos en el día de San Isidro, también se realizaron ventas de comidas para los grupos parroquiales
Las familias disfrutaron de la actividad y la alegría de los sacerdotes de La Inmaculada.