La población en condición de calle parece aumentar cada día y la principal causa es la drogadicción, sumado a la pobreza, por ello, la Municipalidad de Heredia, a través de la Oficina de Igualdad y Equidad, impulsa un proyecto para dar una solución integral al problema en el cantón.
No serían acciones aisladas, sino varias instituciones trabajando en forma conjunta, para sumar todos los esfuerzos y lograr sacar de esa condición a quienes estén en disposición de intentarlo, sometiéndose a los programas de desintoxicación y posterior reinserción a la sociedad.
El proyecto es muy ambicioso, pero sin duda, vendrá a marcar diferencia en el cantón, porque no solo atenderá las necesidades inmediatas de quienes viven en las calles, como alimentación e higiene, sino que ofrecerá la posibilidad de capacitarse para reinsertarse a la sociedad.
Gracias a la donación de un terreno en Guararí, cerca de la Urbanización Liliam Sánchez, según detalló el alcalde José Manuel Ulate, durante la inauguración de la nueva sede de la Oficina de Igualdad y Equidad de Género.
“Actualmente es un terreno que está invadido, se va a limpiar, apenas esté lista la donación, y en el presupuesto del próximo año ya va incluida la construcción por parte de la Municipalidad, la inversión es como dos mil millones de colones, ese es el primer paso”, detalló el alcalde.
El siguiente, es la conformación de una fundación por parte de varias instituciones Heredianas para que sean las encargadas de la administración del lugar, aunque también se valora, si entregar la administración a alguna de las organizaciones sin fines de lucro existentes, ese es un aspecto que aún no se ha definido, explicó Estela Paguaga.
Será un edificio con capacidad para alimentar a 100 personas
El modelo del proyecto, según detalló Paguaga es un edificio de cuatro pisos, cada uno destinado a diferentes áreas de atención.
En el primero será de reducción del daño, donde se contará con batería de baños y duchas, así como ropa y alimentación. Se podrá alimentar simultáneamente a 100 personas.
El segundo ofrecerá procesos de capacitación en diversas líneas relacionadas con la rehabilitación en el tema de consumo de drogas, y también capacitación para mejorar la empleabilidad.
“Una vez que la persona decida ingresar en el programa, se valora para que pase por proceso de internamiento en los centros que ofrece IAFA para desintoxicación, nosotros no venimos a competir con el IAFA en ese sentido, sino a complementar, hay una alianza que se debe fortalecer con otras instituciones también para tener una atención integral”, detalló Estela Paguaga.
El tercer y cuarto piso ofrecen un albergue para personas que ya pasaron por los programas de internamiento, porque lo que más genera recaída, es no tener un lugar de acogida, porque debido al consumo de drogas han roto los vínculos familiares. El centro les da refugio temporal mientras logran insertarse efectivamente en la sociedad”, explicó.
Precisamente durante ese proceso se trabajará las habilidades blandas y preparación para desarrollar sus capacidades para diferentes trabajos.
“Dentro del modelo de gestión lo que queremos no es hacer un centro de rehabilitación, porque ya hay centros de ese tipo, lo que se quiere es darle la opción, el eslabón que faltaba, porque hay algo que se pierde, cuando la persona sale del programa no tiene quien le de contención y eso falta para que sea exitoso. Nosotros daríamos ese lugar de estancia media, daría contención a los que pasaron por el proceso de rehabilitación y no tienen para donde ir, mientras desarrollan habilidades blandas para la empleabilidad y formación técnica profesional, que se logre coordinar con el INA u otras organizaciones comunales, se daría en las salas de capacitación del segundo piso y tendríamos capacidad hasta para albergar a 100 personas”, explicó la directora de la Oficina de Igualdad y Equidad.
Y es que precisamente esta es la Oficina encargada de atender a poblaciones en vulnerabilidad en Heredia, que amplió su área de acción para dejar de ser solo para mujeres, sino que atiende también adultos mayores, personas en condición de calle, LGTB, y cualquier otra población vulnerable.